Imaginemos por un momento que un magnate adinerado aterriza en España y decide invertir su fortuna en este país tan "prometedor" en el que la crisis campa a sus anchas, la economía está en recesión, el paro es insostenible, y la sociedad está dividida entre los resignados conformes con la desgracia y los desesperados por encontrar cualquier tipo de empleo por malo que sea.
Ese magnate, acostumbrado a ganarse los "cuartos" a costa de la desgracia y poca fortuna de los demás, encuentra un filón en este país que, sin lugar a dudas, es de lo más apetecible y prometedor para con sus intereses, que no son otros que seguir enriqueciéndose a costa de todo y encontrar un nuevo lugar en el que llevar a cabo ese "proyecto" que se lo permita.
Cual encantador de serpientes, primero se centra en mediar y convencer a los políticos y políticas, esos a los que hace media hora estábamos criticando en cualquier manifestación por las calles de este país, pero que ahora de forma repentina, miramos como si fueran nuestros mejores representantes o embajadores para sacarle los miles de millones a este señor, conocido como Sheldon Adelson.
Acto seguido, sin ningún informe que avale sus estimaciones, se filtra a los "medios de comunicación" que su proyecto faraónico constaría de dos fases, una primera, en la que se invertirían 6.000 millones de euros, y una segunda para complementar y finalizar el "proyecto", de unos 11.000 millones de euros, lo que nos da un total de 17.000 millones de euros, algo así como un punto y medio (décima arriba, décima abajo) de nuestro constreñido PIB, lo cual según este avispado magnate, generaría unos 260.000 puestos de trabajo.
¿A qué persona no se le ponen los ojos como chiribitas? ¿Qué ciudadano puede decir que no a este proyecto? ¿Qué político puede dejar pasar una inversión tan "enriquecedora" para su ciudad o Comunidad Autónoma?
La verdad, es que es una oferta que nadie en su sano juicio puede rechazar, ¿no?
Ahora hagamos unas pequeñas observaciones; esas que ningún medio de comunicación un tanto populista, suele hacer, y más cuando a la sociedad ya le vendieron antes ese súper proyecto faraónico "tan beneficioso" para su país.
Si el año 2011 cerró con un coste laboral por trabajador de 2.683,86€ de media, y vemos que sigue yendo al alza, nadie se pregunta... ¿cuántos de esos 260.000 puestos de trabajo son directos e indirectos? ¿Se mantendrán a lo largo del tiempo y no sólo durante los primeros años de negocio esos puestos de trabajo? ¿De qué tipo de contratos estaríamos hablando?
Estas dudas me vienen a la cabeza puesto que, si en dicho complejo, pagasen a los empleados y por los empleados lo que se paga de media en España según el INE, pues tendrían unos Costes Laborales aproximadamente de 8.373.643.200€ al año. ¿Esto es sostenible? ¿Dónde está el truco? ¿Os dais cuenta de que esta enorme cifra es descomunal, sin sumar el resto de costes que puede generar dicho complejo faraónico?
El truco está en que el señor Adelson entre sus reivindicaciones pide algo así como una "burbuja legal" única en España, y solamente para su complejo. Dentro de esa burbuja legal y disparate (lo siento, pero no tiene otro nombre), nos encontramos con "perlas" como:
1- Permitir entrar a menores en los casinos acompañados de sus padres y madres. Supongo que para el Sr. Adelson, nunca está de más que los niños y niñas visualicen la ludopatía desde temprana edad, a ver si así crecen entendiendo ese nefasto mundo como algo "normal" y nada pernicioso. (Truco de enfermarlos a temprana edad - futuro cliente)
2- Permitir fumar dentro de ese mundo paralelo al resto de España, o lo que es lo mismo, darle un "privilegio" a un rico por ser rico, mientras que el resto de negocios españoles se comen esa desventaja. Eso por no hablar de lo rápido que se sumarían todos a exigir barra libre de lo mismo, y a ver quién les dice que no. Vamos, que volveremos a tragar humo, y los trabajadores/as que no fumemos, nos lo comeremos con patatas. (Truco del privilegiado que contagia al resto)
3- "Relajar" los Convenios Laborales. Si ya nuestros trabajos son precarios, y la "nueva" Reforma Laboral se encarga de que se precarice más, pues este avispado magnate, aprovechando la desesperación y la coyuntura de este país, pues juega con ello en esta partida de póker. -O me lo pones todo baratito, o no voy y te comes tú el marrón y el desempleo. Y ya sabes... a la gente le vale cualquier cosa. (Truco del ahorro)
4- Modificar la Ley de Extranjería para que sus supuestos 12 directivos, puedan incorporarse de forma inmediata al trabajo. Me parece bien que generen empleo, pero sus 12 directivos no son mejores personas ni tienen más derechos por ser más ricos que otros tantos humildes inmigrantes extranjeros que quieren trabajar en nuestro país. Si hay unas leyes y un trámite, por algo será, supongo, a no ser... A no ser que esto permita traer más mano de obra barata del extranjero. (Truco del ahorro)
5- Entre 2 y 10 años de exenciones fiscales, pagos de cuotas a la Seguridad Social, y la mayor cantidad posible de impuestos que no contenten al Sr. Adelson. Primero se ahorran el pagar al Estado, y una vez vaya todo viento en popa y a toda vela, ya se encargan de llevarse el dinerito calentito a EE.UU que para algo son de allí, ¿no? (Truco del ahorro y salida de capital)
6- Infraestructura de accesos a la zona. Aquí se supone que pagaríamos nosotros con nuestro dinerillo. Seguimos sin saber en dónde, cómo y con qué condiciones. (Truco del ahorro)
Estos son algunos puntos, dentro de este proyecto lleno de opacidad, en el que nada se detalla, nada viene avalado por informes técnicos, no se sabe su ubicación, no hay informes de impacto ambiental y de viabilidad, etcétera.
Y ahora, para terminar, vamos con el postre que nos dejará este macrochiringuito de juego y espectáculo.
¿Qué hay del impacto medioambiental? ¿Qué hay del fraude fiscal? Ese fraude que ya en la actualidad ronda los 70.000 millones de euros anuales. ¿Qué hay del blanqueo de capitales? ¿Qué hay de la precariedad laboral? ¿Qué hay del modelo de ciudad plasmado en un Plan General de Ordenación Urbanística? ¿Qué hay de las enfermedades y adicciones que se disparan con estas actividades una vez quedan tan asentadas en nuestro día a día? Que nadie se olvide que tal y como está el panorama económico y social nacional, esto puede servir de efecto llamada para mucha gente para terminar de aniquilar sus ahorros en lo que ellos llamarían "un intento de golpe de suerte". ¿Qué será de la prostitución y el narcotráfico que SIEMPRE se bailan un amargo tango junto a estos negocios en los que se mueven tantas mafias? ¿Qué será de esos otros espectáculos vejatorios como el "alquiler" de chicas o chicos de "compañía", estilo Vegas, de los que ahora no nos hablan? ¿Quién nos garantiza que una vez se haya beneficiado y enriquecido el Sr. Adelson, aprovechando estas condiciones (supongo que algunas temporales) tan lujosas y aventajadas, no hará como otros grandes magnates y se irá vendiendo su macro prostíbulo, con juego añadido, a otro avispado magnate como él?
En fin señores y señoras... si queréis Vegas, viajad a Nevada que allí ya está montado todo este espectáculo. Mi humilde punto de vista es que 260.000 supuestos puestos de trabajo sin nada que lo avale, no merecen esta bajada de pantalones, no se merecen esta patada a las leyes, no se merecen que nos precaricen más, no se merecen que nos hagan más enfermos, no se merecen que nos envuelvan todavía más en corrupción, y sobre todo, no se merecen que este país vuelva a crecer a base de ladrillo, chiringuito, vicios y turismo del nefasto.
Algunos todavía soñamos con un país que crezca por mérito propio, por investigación, I+D+i, turismo del sano, espectáculo sano y no vejatorio, actividades lúdicas que no impliquen irse a la ruina. Un país en el que el fraude fiscal, la corrupción, las mafias, el blanqueo de capitales, la extorsión y explotación de la mujer no tengan cabida. Todo lo contrario, es un suicidio.
Si algo aprendí durante todos estos años es que, las decisiones más equivocadas las tomamos en los momentos de mayor desesperación. Si dejamos que se nos nuble el juicio por unos puestos de trabajo, sostenidos gracias a la desgracia ajena, entonces es que todavía no sabemos convivir como humanos.
Ya una vez, se le mandó un mensaje equivocado a la juventud que decía: "deja tus estudios y vive de la construcción". No volvamos a caer en la trampa de darle cancha al capitalismo más dañino de todos, el que termina sacando a la gente de los centros de formación para darles un trabajo precario en un mundo de locura.
A todos nos gusta ir alguna vez a un casino, a jugar al bingo, o a echar una partida de póker con los amigos, pero seguramente a nadie nos guste que se permita un macrocomplejo que atraería todos estos males en grandes cantidades, y para colmo, con un amparo legal que no tienen el resto de empresas de este país, y con razón de que no se haya permitido hasta la fecha nada similar.
Por último pensemos en una cosa: un país en crisis, en el que la gente está arruinada o al borde de estarlo, sin nada que perder, y sin temores a los que hacer frente, está dispuesta a todo por ganarse unos eurillos.
Primero nos jugaremos lo poco que nos queda. Algunos hombres y mujeres harán la calle junto a estos lugares llenos de gente rica que pueda darles algo para ir tirando, llegar a fin de mes, y dar de comer a la familia. Otros estarán dispuestos a trabajar bajo unas condiciones nefastas o desconocidas hasta la fecha. La corrupción y el blanqueo de dinero será el pan de cada día. La justicia, al igual que en las Vegas, estará al servicio del mejor postor. La prostitución y la delincuencia serán algo cotidiano en nuestro día a día, y que nadie se engañe, son actividades inherentes de este mundo de ricos que se hacen más ricos a costa de la desgracia ajena, del enfermo perdedor.
Abramos los ojos de una vez por todas. Este país se merece crecer y fortalecerse de un modo más justo, y no mediante proyectos que lo único que buscan es empobrecer más al ciudadano desesperado, al jugador, para enriquecer a la banca capitalista y a un señor que busca el vacío legal para llevar a cabo un proyecto que no tiene ningún impacto positivo, salvo el de crear unos puestos de trabajo y un turismo sostenidos por la desgracia ajena.
No es coherente criticar a los políticos corruptos, la banca choricera de los desahucios, el enriquecimiento desmedido de algunos empresarios a costa de la explotación de los trabajadores, y luego, por 260.000 empleos que NO SON REALES ni fundamentados en un estudio de viabilidad, volvernos permisivos, conformistas, ilusos y consentidores con las injusticias, porque el fraude, la explotación sexual, el "mafioseo", el enriquecimiento a base de la desgracia ajena, la precariedad laboral, el blanqueo de capitales, y el narcotráfico, son injustos, vomitivos, repugnantes, y desde luego nada justificables por unos puestos de trabajo que repito, son para más inri, meras estimaciones.
Yo voto NO a la estampa de la triste puta en la puerta del hotel, al lado del vagabundo arruinado, y del sicario enfarlopado que viene a blanquear algo de dinero procedente de la trata de mujeres, el narcotráfico, o del tráfico de armas. Os guste o no, esa es la España que algunos quieren vender.
Estamos desesperados, necesitamos recuperarnos, trabajar, abandonar la incertidumbre y dejar los temores a un lado, pero que nadie se olvide, que la desesperación, nos suele llevar a cometer errores por no dedicar el tiempo suficiente a reflexionar detenidamente.
"La Banca, siempre gana".
Saludos y repito, mi humilde opinión.